Descubre la Mazda 626 en su cuarta generación GE. Encuentra detalles sobre especificaciones, historia y características de este icónico modelo en Portugal.
La Mazda 626 de cuarta generación, conocida por su código interno GE, fue un modelo que dejó una huella significativa en el mercado durante su época de producción, que abarcó desde 1987 hasta 1992. Este vehículo se p...
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28 abr 2025
La Mazda 626 de cuarta generación, conocida por su código interno GE, fue un modelo que dejó una huella significativa en el mercado durante su época de producción, que abarcó desde 1987 hasta 1992. Este vehículo se posicionó como un sedán mediano que ofrecía una combinación de diseño atractivo, confort y tecnología avanzada para su tiempo.
El diseño de la Mazda 626 GE fue un punto destacado en su generación. Con líneas suaves y aerodinámicas, el vehículo ofrecía una estética moderna que se diferenciaba de sus predecesores. El frontal se caracterizaba por una parrilla más amplia y ópticas alargadas, lo que le daba un aspecto más agresivo y actual. En la parte trasera, las luces traseras estaban integradas en una forma que complementaba la elegancia del diseño general, haciendo de este modelo una opción muy atractiva para los compradores de finales de los años 80 y principios de los 90.
Al ingresar al Mazda 626 GE, los ocupantes eran recibidos por un interior bien diseñado y confortable. Los materiales utilizados en el habitáculo eran de buena calidad, y el diseño del tablero era intuitivo y ergonómico. El espacio interior fue optimizado para ofrecer comodidad a todos los pasajeros, con asientos que proporcionaban un buen soporte durante los viajes largos. Además, la cabina contaba con un sistema de climatización avanzado para la época, así como opciones de equipamiento que incluían radio con cassette y control de ventanas eléctricas, lo que aumentaba considerablemente la experiencia de conducción.
La Mazda 626 GE se ofreció con una variedad de opciones de motorización, incluyendo motores de cuatro y seis cilindros. Los motores de cuatro cilindros eran conocidos por su eficiencia en combustible, mientras que los de seis cilindros brindaban una experiencia de conducción más potente y emocionante. La transmisión estaba disponible en versiones manuales y automáticas, permitiendo a los conductores elegir su preferencia. Esta versatilidad en las opciones de motorización y transmisión ayudó a la Mazda 626 GE a adaptar su rendimiento a las necesidades de un amplio espectro de conductores.
En términos de tecnología, la Mazda 626 GE fue pionera en varias características que más tarde se convirtieron en estándar en vehículos de su clase. Equipo de seguridad como frenos antibloqueo (ABS) y bolsas de aire comenzaron a estar disponibles en este modelado, ofreciendo mayor protección a los ocupantes. Asimismo, sus sistemas de audio y comunicación eran avanzados para la época, lo que añadía un valor adicional al automóvil.
Una de las características más apreciadas por los propietarios de la Mazda 626 GE fue su excelente manejo. La suspensión fue diseñada para adaptarse a diversas condiciones de carretera, proporcionando un equilibrio entre confort y agilidad. Esto permitió que el vehículo manejara de manera sobresaliente en zonas urbanas, así como en viajes largos por carretera. La respuesta del volante y la dirección también eran notoriamente precisas, lo que aumentaba la confianza del conductor en diversas situaciones.
El legado de la Mazda 626 GE continúa, ya que sirvió para establecer la imagen de calidad y confiabilidad que Mazda busca mantener en sus modelos actuales. Aunque en la actualidad no es un modelo muy común en las calles, su influencia perdura en la forma en que se fabrican los sedanes hoy en día. Con su combinación de estilo, confort y tecnología, la Mazda 626 Generación 4 sigue siendo recordada como un símbolo de innovación de su tiempo.
En resumen, la Mazda 626 GE es un clásico que representa un capítulo importante en la historia de la marca y en la evolución de los vehículos de pasajeros durante su época.